PERIODISMO PRECARIO Y SIN PREGUNTAS ¿PERIODISMO?

Uno de los problemas que asola al periodismo actual es la precariedad laboral y todo lo que esta lleva consigo. Podemos definir la precariedad laboral como escasez de oferta de empleo y poca estabilidad en el ejercicio del mismo. La OIT en sus PRENSA Y BANCOSrecientes informes amplía esta definición e introduce la pérdida de derechos de los trabajadores. Esto, unido a la actual crisis económica se convierte en una bomba de relojería que ha cambiado radicalmente la esencia de los medios de comunicación.

Los medios tradicionales nopueden sostenerse debido a  que sufren un endeudamiento crónico  como consecuencia de la dependencia del crédito de entidades financieras  y por  la falta de inversores y publicidad en una época en la que el consumo está a la baja.

Josep Maria Carbonell Abelló, doctor por la universidad Ramón Llull afirma en su libro “El futuro de la comunicación: redes, medios y poder” que a pesar de que existen comités profesionales y códigos deontológicos en muchos medios los periodistas no pueden ejercer de manera responsable y meticulosa el ejercicio de su profesión.

Una de las soluciones que han tomado los responsables de estos medios de comunicación ha sido la reducción del gasto empezando por el capital humano. El nuevo modelo apuesta por la figura del becario, una persona con poca experiencia y en ocasiones poca formación y falta de especialización lo cual resiente inevitablemente la calidad final del producto.

Lo que en un principio parece una simbiosis que beneficia  a ambas partes; el empresario se ahorra los costes de la contratación de un periodista profesional y el becario gana experiencia en el mundo laboral; acaba perjudicando al público. La situación actual en España se recoge en la siguiente encuesta realizada a becarios por la universidad Rey Juan Carlos I:

http://campus.usal.es/~comunicacion3punto0/comunicaciones/019.pdf

La Unión Europea ha intentado paliar esta práctica en una normativa firmada por los 28 Estados miembros aunque no es de carácter vinculante. El comisario europeo de empleo László Andor ha afirmado: Los estudiantes en prácticas no deben usarse como mano de obra gratis o barata, ni deben sustituir a trabajadores permanentes, en su lugar, las prácticas deberían considerarse como una inversión, que aporta valor al empresario y al becario», ha resaltado.

«Inevitablemente, la precariedad laboral acaba haciendo precaria la vida entera”         Victoria Camps

Un ejemplo muy sonado lo protagonizó el presentador y comentarista deportivo Josep Pedrerol, quien culpaba de los fallos del programa a los becarios. Días después matizó estas declaraciones afirmando que no tenía nada en contra de ellos sino que denunciaba la falta de preparación en su programa.

Un nuevo problema con el que se enfrenta el periodismo de hoy en día son las denominadas “ruedas de prensa sin preguntas” aunque esto entraña una contradicción en sí misma pues socava el papel del periodista como generador de opinión al no poder plantear las preguntas que interesan al ciudadano, en definitiva, los políticos confunden rueda de prensa con comunicado. El catedrático Emérito en la Facultad de Ciencias de la Información de la Complutense José Luis Martínez Albertos ya subrayó en 1983 la importancia social de las preguntas en las ruedas de prensa en su obra “Curso general de redacción periodística”.

El caso más llamativo, aunque no el único, es el del actual presidente Mariano Rajoy que ha suscitado todo tipo de chascarrillos en la red. Efectivamente los periodistas han advertido lo innecesario de su presencia en este tipo de eventos y se han negado a darles cobertura mediante la confección de un manifiesto firmado por las principales asociaciones de periodistas.

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BWsFoOuCAAEcrwHImágenes de Twitter

Después de esta investigación podemos afirmar que un periodismo precario y sin preguntas  no es periodismo. Una de las posibles soluciones pasa por devolver al becario al lugar que le corresponde, siendo tutelado por periodistas licenciados que le guíen en sus prácticas y completen su formación. Hay que devolver el protagonismo a los periodistas para que tiendan puentes entre la opinión pública y la política. Qué duda cabe de que en las empresas de comunicación el capital principal es el humano y se debe revindicar un contrato en vez de prácticas indefinidas, que es el régimen en el que muchos se ven actualmente atrapados además de una revisión de las condiciones de trabajo. Esto repercutiría en un mejor periodismo que es en definitiva un mejor producto que la gente compraría y aunque esto no fuese suficiente para superar las pérdidas económicas sí se saldría de la espiral autodestuctiva en la que se ven inmersas las empresas de comunicación.  Queremos concluir citando el lema de la FAPE: “Sin periodistas no hay periodismo y sin periodismo no hay democracia”.

 

ALBERTO SANZ BLANCO Y DAVID SALOMÉ IBARBURU